lunes, 7 de noviembre de 2011

UN RECUERDO INFANTIL

Fue en el año 2003, ese verano me instalé en donde vivo ahora, en la excelentísima ciudad de Ferrol.No conocía a nadie, y no sabía si los niños del colegio me iba a admitir.
Antes de empezar el curso, cuando nos matriculamos, nos enseñaron el colegio y cómo estaban las clases distribuidas. Cuando llegabamos a las nuestras, nos parábamos a verlas más de cerca. Las clases eran: mi hermana en 5º de primaria, mi hermano en 3º y yo en 1º.
Mi clase era grande, con capacidad para más de 20 niños. Había una gran pizarra verde detrás de la mesa del profesor. A la derecha de la habitación, había una pequeña biblioteca, en la que podíamos coger libros cada semana, y al lado de la biblioteca había unos servicios. A la izquierda había un gran ventanal con cactus. Detrás de la habitación había un corcho y otro ventanal.
El primer día de colegio, por suerte no era el único nuevo. La profesora era una monja, como la mayoría, mayor pero maja (no como otras de años posteriores),y se llamaba Trinidad, que nos puso en nuestros sitios, en grupos de cuatro.
Estaba con niños majos, al principio, pues con el tiempo se volvieron pijos, inaguantables y se metían con migo y mi mejor amigo, que llegó en el 2º Trimestre, cuando estab en 3º de Primaria.

1 comentario:

  1. Ulises, tienes una mente precisa, sobria y exacta. Entre todos estos datos objetivos, ese "por suerte" y ese "pijos inaguantables" parecen casi un desmadre de lirismo.
    Me gusta tu estilo de atestado policial.

    Un saludo.

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